El 21° domingo después de la Resurrección.
Lucas 11,9-20
[9]También les aseguro: pidan y se les dará, busquen y encontrarán, llamen y se les abrirá.
[10]Porque el que pide, recibe; el que busca, encuentra; y al que llama, se le abrirá.
[11]¿Hay algún padre entre ustedes que dé a su hijo una serpiente cuando le pide un pescado?
[12]¿Y si le pide un huevo, le dará un escorpión?
[13]Si ustedes, que son malos, saben dar cosas buenas a sus hijos, ¡cuánto más el Padre del cielo dará el Espíritu Santo a aquellos que se lo pidan!».
[14]Jesús estaba expulsando a un demonio que era mudo. Apenas salió el demonio, el mudo empezó a hablar. La muchedumbre quedó admirada,
[15]pero algunos de ellos decían: «Este expulsa a los demonios por el poder de Belzebul, el Príncipe de los demonios».
[16]Otros, para ponerlo a prueba, exigían de él un signo que viniera del cielo.
[17]Jesús, que conocía sus pensamientos, les dijo: «Un reino donde hay luchas internas va a la ruina y sus casas caen una sobre otra.
[18]Si Satanás lucha contra sí mismo, ¿cómo podrá subsistir su reino? Porque -como ustedes dicen- yo expulso a los demonios con el poder de Belzebul.
[19]Si yo expulso a los demonios con el poder de Belzebul, ¿con qué poder los expulsan los discípulos de ustedes? Por eso, ustedes los tendrán a ellos como jueces.
[20]Pero si yo expulso a los demonios con la fuerza del dedo de Dios, quiere decir que el Reino de Dios ha llegado a ustedes.
Feliz y Bendito domingo.